La Vía de la Plata, la calzada del oro
La Vía de la Plata es la antigua calzada romana que unía las ciudades de Asturica Augusta (Astorga) con Emerita Augusta (Mérida). A lo largo de los años diferentes culturas se han servido de este camino para diferentes usos: transporte de tropas y/o materiales, comercio, peregrinación…
En la Edad Media la calzada romana se reconvierte en uno de los Caminos de Santiago, el Camino del Sur, que unía las tierras del sur con el Camino Tradicional o Francés en la ciudad de Astorga. El sendero oficial que cubre este camino es el Sendero de Gran Recorrido GR-100, homologado y señalizado para su uso.
Hoy en día se conoce como Ruta de la Plata al trazado de la autovía A-66 que une Gijón con Sevilla y que transcurre casi paralelo a la carretera N-630. Los cuatro recorridos (la calzada romana, el Camino de Santiago, la carretera nacional y la autovía) se solapan en algunos puntos y van uniéndose y alejándose a lo largo de los kilómetros.
La Vía de la Plata actualmente es heredera de aquella calzada romana y engloba cientos de kilómetros, experiencias y lugares para disfrutarla. ¡No te la pierdas!:
La Vía de la Plata
En el siglo II a.C. los romanos modificaron el mapa viario peninsular añadiendo la calzada de la Vía de la Plata, que uniría Asturica Augusta (Astorga) con Emerita Augusta (Mérida). La llamaron Iter ab Emerita Asturicam y fue clave para la conquista romana, luego musulmana y más tarde cristiana. Hasta las tropas de Napoleón pisaron estas piedras.
La Vía de la Plata: oro parece, plata no es.
La Vía de la Plata ya se denomina así en el siglo XVI, pero nunca tuvo una relación significativa con el comercio de este metal. Sin embargo, fue una ruta frecuente en época romana para transportar el oro de Las Médulas, importante mina junto a la actual Ponferrada y declarada Patrimonio de la Humanidad. Entonces, ¿por qué se llama de la Plata?
Se sabe que los musulmanes la nombraron al-Balat o BaLaTa, el camino empedrado, que, fonéticamente, suena parecido a plata. Es posible, ya que no se sabe con certeza, que la traducción al castellano fuese errónea y ese camino empedrado pasase a ser camino de la plata simplemente por cómo sonase el término en árabe.
Los Caminos de la Plata
En Castilla y León los caminos relacionados con la Vía de la Plata recorren unos 400 kilómetros por las provincias de León, Zamora y Salamanca visitando algunos de las localidades más bellas de la comunidad. Te damos algunas ideas para la próxima visita:
León
Entrando en la provincia de León nos vienen aromas de buen comer: quizá cecina de chivo de Vegacervera o manzanas del Bierzo, a lo mejor vino de la Denominación de Origen Tierra de León. ¿Qué te apetece?
La calzada romana se dirige hacia Astorga, tierra de maragatería y cruce de caminos: aquí enlazamos con el Camino de Santiago Tradicional o Francés para continuar hasta Compostela. Un poco más al oeste se encuentra Ponferrada y el espacio natural de Las Médulas, perfectas para una experiencia única.
- No te pierdas: la visita a Castrillo de los Polvazares, un pueblo maragato que te transportará al pasado.
Un desvío hacia el norte nos lleva a la ciudad de León, de origen romano y con un conjunto urbano incomparable.
- No te pierdas: las murallas, la Catedral de Santa María de Regla o la Basílica de San Isidoro, conocida como la Capilla Sixtina del Románico por las pinturas de su Panteón Real. Ya sólo nos queda cruzar el Puerto de Pajares para entrar en Asturias.
Zamora
La provincia de Zamora está cicatrizada de norte a sur (o viceversa) por la Vía de la Plata. Destaca la capital, Zamora, conocida por su románico, pero es casi desconocido su interesante modernismo.
- No te pierdas: el castillo, la Catedral del Salvador o el Mirador del Troncoso.
Territorio de vino y bodegas, las Denominaciones de Origen Tierra del Vino y Toro encabezan las listas de caldos zamoranos, con la ciudad de Toro como sinónimo de viña y vino. Bañada por las aguas del río Duero, es una bella localidad para perderse.
- No te pierdas: su arquitectura tradicional, sus templos mudéjares y el interesante Pórtico de la Majestad en la Colegiata de Santa María, ¡una obra de arte!
Al norte de Zamora se encuentran las ruinas del Monasterio de Santa María de Moreruela, dentro del municipio de la Granja de Moreruela. Se la considera la primera fundación cisterciense de la región y una de las primeras de la península.
- No te pierdas: la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila, muy cerca de la Granja de Moreruela. Es uno de los lugares de invernada de aves migratorias más importantes de la península y donde se encuentra una de las poblaciones más numerosas de avutarda de Europa.
De camino hacia el noroeste de la provincia encontramos las localidades de Rosinos de Vidriales y Santibáñez de Vidriales, donde se han hallado restos de un campamento romano ubicado aquí para protección del transporte del oro de Las Médulas.
- No te pierdas: los restos del Campamento Romano de Petavonium y el Centro de Interpretación de los Campamentos Romanos.
Salamanca
El sur montañoso y el norte llano de la provincia de Salamanca nos dan la bienvenida, vengas de donde vengas. Si vienes desde Extremadura te recibirá la Reserva de la Biosfera de las Sierras de Béjar y Francia, con las montañas más altas de la provincia y tres localidades declaradas Conjunto Histórico Artístico: Béjar, Candelario y Montemayor del Río.
- No te pierdas: las murallas de Béjar, las batipuertas de Candelario o el castillo de Montemayor del Río.
Siguiendo el trazado de la Vía de la Plata podremos encontrar restos de calzada romana, como es el caso de las localidades de La Calzada de Béjar y Fuenterroble de Salvatierra.
- No te pierdas: las ruinas del Fortín Romano que se conserva en La Calzada de Béjar, construido a la par que la vía romana.
Salamanca emerge a orillas del río Tormes, sobre el que se mantiene, firme, el Puente Romano, paso tradicional de la Vía de la Plata.
- No te pierdas: su casco antiguo declarado Patrimonio de la Humanidad, con sus Catedrales, Plaza Mayor, Casa de las Conchas y una de las Universidades más antiguas del mundo, entre otras maravillas.
Al norte de la ciudad de Salamanca se encuentra el pueblo de Topas, donde podrás descubrir un bello castillo-palacio del siglo XV
- No te pierdas: el Castillo del Buen Amor está declarado Bien de Interés Cultural y es visitable.
¡Gracias por leernos!